MADRID.- El capitán de fragata Francisco Javier Montojo Salazar falleció la noche de este viernes al precipitarse al mar de forma accidental desde el buque Hespérides, con base en Cartagena, que desarrolla proyectos de investigación en la Antártida, según ha informado la Armada Española a través de su cuenta de Twitter.
La
Armada Española ha afirmado que es "un día muy triste" y ha transmitido
su pésame a los familiares y amigos del capitán. "Descanse en paz", ha
concluido la Armada en un hilo de Twitter.
Un militar con vocación científica
Montojo se encontraba solo en la cubierta del buque, en una situación de
mala mar, según fuentes de Defensa, cuando desapareció. Montojo aunque
era militar de profesión no formaba parte de la tripulación del buque, y
se encontraba a bordo del Hespérides como miembro del grupo de trabajo
científico Galileo, el sistema de navegación por satélite europeo.
Muy triste noticia el fallecimiento del capitán de fragata Javier Montojo Salazar en el buque de investigación oceanográfica Hespérides. Todo mi cariño y apoyo a su familia y compañeros. Descanse en paz pic.twitter.com/NKoNi8CPhA— Mª Dolores Cospedal (@mdcospedal) 3 de marzo de 2018
En la noche de ayer ha fallecido el capitán de fragata Javier Montojo Salazar, participante en uno de los proyectos de investigación que desarrolla el #BIOHespérides....— Armada Española (@Armada_esp) 3 de marzo de 2018
El oficial navegaba a bordo del buque cuando desapareció en las
proximidades de la base Juan Carlos I, en la isla de Livingston. (La base científica española, dependiente del Centro Superior de
Investigaciones Científicas (CSIC), funciona desde hace tres décadas.)
Tras seis horas de búsqueda y rastreo en la mar, con todos los medios disponibles, se localizó su cuerpo, se recuperó y se confirmó su muerte. En las últimas fechas se había registrado climatología adversa en la zona.
El capitán fue visto por última vez a las 6 de la tarde de ayer, hora local, (10 de la noche en la España peninsular) y el cuerpo fue hallado por anoche después de constatar que no se encontraba a bordo del barco.
Se desconocen las causas del accidente, aunque todo indica que estaba solo en cubierta en el momento del accidente, han señalado fuentes de Defensa.
Tras seis horas de búsqueda y rastreo en la mar, con todos los medios disponibles, se localizó su cuerpo, se recuperó y se confirmó su muerte. En las últimas fechas se había registrado climatología adversa en la zona.
El capitán fue visto por última vez a las 6 de la tarde de ayer, hora local, (10 de la noche en la España peninsular) y el cuerpo fue hallado por anoche después de constatar que no se encontraba a bordo del barco.
Se desconocen las causas del accidente, aunque todo indica que estaba solo en cubierta en el momento del accidente, han señalado fuentes de Defensa.
Actualmente,
los restos del capitán se encuentran a bordo del buque, que navega
hacia el puerto de Usuahia (Argentina) para proceder a su repatriación, aunque podría desviarse a Punta Arenas (Chile), dependiendo de la logística del
avión enviado por el Ejército del Aire para repatriar el cadáver.
El cuerpo podría llegar el lunes por la mañana a Argentina o Chile, desde donde se iniciará el proceso de repatriación del cadáver, que podría regresar a España el martes, donde se le realizará la autopsia por orden del juzgado togado militar de Marina.
La familia, que se encuentra en San Fernando, ha sido informada y ya se encuentra apoyada por un equipo de miembros de la Armada.
El capitán de fragata Montojo Salazar iba a cumplir 53 años el próximo mes de mayo y era natural de San Fernando (Cádiz).
Destinado en la Dirección General de Armamento y Material del Ministerio de Defensa, el capitán de fragata participaba en uno de los proyectos de investigación que desarrolla el buque.
Francisco Javier Montojo Salazar tenía residencia en la localidad de San Fernando (Cádiz) y durante varios años fue jefe de la Sección de Astronomía del Real Instituto y Observatorio de la Armada en San Fernando.
El Hespérides partió del puerto de Cartagena (Murcia) el pasado 24 de noviembre y llegó a la Antártida tras dos meses de navegación.
El cuerpo podría llegar el lunes por la mañana a Argentina o Chile, desde donde se iniciará el proceso de repatriación del cadáver, que podría regresar a España el martes, donde se le realizará la autopsia por orden del juzgado togado militar de Marina.
La familia, que se encuentra en San Fernando, ha sido informada y ya se encuentra apoyada por un equipo de miembros de la Armada.
El capitán de fragata Montojo Salazar iba a cumplir 53 años el próximo mes de mayo y era natural de San Fernando (Cádiz).
Destinado en la Dirección General de Armamento y Material del Ministerio de Defensa, el capitán de fragata participaba en uno de los proyectos de investigación que desarrolla el buque.
Francisco Javier Montojo Salazar tenía residencia en la localidad de San Fernando (Cádiz) y durante varios años fue jefe de la Sección de Astronomía del Real Instituto y Observatorio de la Armada en San Fernando.
El Hespérides partió del puerto de Cartagena (Murcia) el pasado 24 de noviembre y llegó a la Antártida tras dos meses de navegación.
Un militar con vocación científica
Javier Montojo Salazar, con destino en la Dirección General de Armamento y Material, tenía una "profunda vocación científica",
según detallan amigos del militar.
En varias ocasiones había
manifestado su ánimo de participar en esta misión en aguas de la
Antártida, donde se brinda apoyo a un equipo de investigadores y en la
que la Armada también pone en marcha sus propios proyectos científicos.
En este escenario conviven los militares de la Armada, a cargo del buque Hespérides,
y los del Ejército de Tierra, que entre otros objetivos mantienen las
instalaciones del cuerpo militar en la Antártida.
A finales de enero, el
buque recaló en la isla Decepción para visitar a los militares del
Ejército de Tierra.
Antes de
incorporarse a esta misión, el capitán de fragata había estado destinado
en el Observatorio de Marina, en San Fernando (Cádiz);
concretamente, en la Sección de Astronomía del Real Instituto y
Observatorio, de la que era jefe. Entre sus investigaciones figuraba el
análisis de los residuos espaciales.
Montojo Salazar era, además,
profesor en la Escuela de la Armada.
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