MADRID.- Una conversación entre el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, y el del
Consejo Europeo, Donald Tusk, despejó definitivamente las dudas de
España para apoyar el acuerdo del brexit cuando ya se estaba a punto de
desconvocar la cumbre de líderes europeos del domingo en Bruselas, que
va a ratificar ese pacto.
Fuentes del Gobierno han informado de las intensas gestiones que se
han sucedido en las últimas horas para lograr todas las garantías que
España necesitaba en relación con la situación en que quedará Gibraltar
tras la salida del Reno Unido de la Unión Europea.
La posición de España ha sido firme en los últimos días, tal y como
ha venido reiterando el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y ha
sido al límite del tiempo para mantener o desconvocar la cumbre de
mañana cuando se ha conseguido el desbloqueo.
El Ejecutivo considera que los socios europeos han ido comprobando
que el veto de España iba en serio, que era una realidad que podía no
lograrse el acuerdo.
A medida que han ido transcurriendo los días han ido situándose al
lado de sus demandas, por lo que asumían que, si no había un plácet por
parte española, no tenía sentido celebrar el Consejo Europeo de
Bruselas.
Ese es el mensaje que el propio Sánchez trasladó el viernes en La
Habana, donde ratificó que, sin las garantías necesarias en relación con
Gibraltar, no habría acuerdo.
Ahora aseguran que esas garantías se han logrado y, de hecho, Sánchez
ha considerado que se ha obtenido un “triple blindaje”, que ha
calificado de “histórico”.
“Nos jugábamos mucho. Ahora teníamos que fijar para siempre el encaje de Gibraltar”, han señalado las fuentes citadas.
El hecho clave para el acuerdo es que la Comisión Europea se ha
sumado a los países comunitarios para garantizar las demandas de España y
que el Reino Unido lo asume por escrito. Unas garantías que el Gobierno
recalca que tienen carácter jurídico.
“O había el 100 por 100 de garantías o no había acuerdo”, se subraya desde el Ejecutivo.
No ha habido en las últimas horas una conversación entre el
presidente del Gobierno y la primera ministra británica, Theresa May, y
en la última, esta misma semana, Sánchez insistió en que no podía
aceptar el texto del acuerdo entre la UE y el Reino Unido tal y como
estaba redactado.
Sí hubo esa conversación entre Sánchez y Tusk al mediodía de hoy que
ha permitido a España avalar el borrador en el que se fijan las
condiciones de salida del Reino Unido de la UE y mantener la cumbre de
mañana.
El Gobierno lamenta que en ese borrador se introdujera un artículo
ante el que la Abogacía del Estado alertó porque podía evitar que
cualquier acuerdo en torno a la situación de Gibraltar en la UE no
tuviera que contar con el consentimiento expreso de España.
De la misma forma, insisten en reprochar la actitud del Gobierno de
Mariano Rajoy, ya que consideran que, si en 2017 se hubieran fijado unas
garantías más elevadas en la negociación del “brexit” en relación con
Gibraltar, no se habría llegado a la situación actual.
Con todo, las fuentes aseguran que Sánchez está “personal y
políticamente” muy satisfecho por la batalla que ha dado y el que se
hayan logrado todas las garantías para España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario