SEVILLA.- El Gobierno ha negado hoy que esté presionando a la Justicia para evitar que los dirigentes independentistas del "procés" sean acusados de un delito de rebelión, y ha rechazado que las declaraciones de miembros del Ejecutivo al respecto supongan un gesto a los soberanistas.
Celaá se ha pronunciado así en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros
en relación con los escritos que las acusaciones personadas en la causa
que se instruye en el Supremo deben presentar la próxima semana.
La portavoz del Ejecutivo ha recalcado que el Ejecutivo no entra "para nada" en lo que haga la Fiscalía, que
actúa con "autonomía" en defensa de los intereses generales, tampoco
sobre lo que haga la Abogacía del Estado, y que no ejerce "ningún tipo
de presión" sobre el poder judicial.
Ha argumentado que la Abogacía trabaja con criterios "exclusivamente jurídicos" en el escrito que presentará la próxima semana.
"El
Gobierno se mantiene absolutamente imparcial en relación al procés", ha
aseverado Celaá antes de insistir en el mensaje de respeto a la
separación de poderes.
Ha
añadido que el Gobierno "no marca el paso" y que, como los tribunales
son independiente, no tienen por qué ver alterado su ritmo. También ha
negado que el Ejecutivo haya hecho "guiños" a los independentistas en
los últimos días.
Y ha subrayado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no habló el pasado miércoles en el Congreso de su opinión sobre el delito de rebelión en Cataluña, sino que respondió al presidente del PP, Pablo Casado, cuando éste le acusó de ser cómplice de un golpe de Estado.
Por
eso aludió al exdiputado del PP Federico Trillo y a su posicionamiento
de 1994 sobre la necesidad del uso de violencia y armas en los golpes de
Estado.
En la reunión de este
viernes del Consejo de Ministros, la primera del Gobierno de Pedro
Sánchez fuera de Madrid y también la primera ocasión en ocho años que la
capital de España no la alberga -se ha celebrado en Sevilla-, el
Gobierno ha decidido también recurrir al Tribunal Constitucional la resolución del Parlament en la que reprobó al Rey.
Una decisión que Celaá ha justificado
"por sentido de Estado", ya que entiende que la resolución del
Parlamento catalán es inconstitucional porque "supone un nuevo intento
de iniciar un proceso unilateral que desemboque en la proclamación de
una hipotética república".
A Casado se ha dirigido hoy la portavoz del Gobierno para reclamarle que cambie su modo de hacer política para
buscar soluciones a la crispación, y ha apuntado que tanto la
moderación como evitar el insulto son buenas medidas al respecto.
Una
llamada que ha realizado después de que Casado acusara el miércoles a
Sánchez de ser partícipe de un golpe y el presidente del Gobierno
decidiera romper relaciones con él hasta que no rectifique.
Es habitual que en las reuniones que se convocan fuera de Madrid se aborden asuntos y se aprueben medidas de especial trascendencia para la comunidad que las alberga.
Sin
embargo, debido a que Andalucía se encuentra en precampaña para los
comicios del 2 de diciembre, no es posible acordar medidas que puedan
interpretarse en clave electoral.
Eso no ha sido óbice para que se hayan adoptado medidas con el fin de paliar los daños provocados por las recientes lluvias torrenciales en la comunidad andaluza, y en especial en Málaga.
Al
respecto, el Gobierno ha dado pasos para declarar los municipios que
han sufrido los daños zona afectada por una emergencia, lo que
facilitará ayudas extraordinarias.
Entre otras medidas aprobadas en la reunión de Sevilla se encuentra el reparto de los menores extranjeros no acompañados entre las comunidades o la prohibición de las denominadas "narcolanchas".
Celaá, en su intervención inicial, ha expresado la satisfacción del Gobierno por celebrar una reunión en Sevilla.
"Estar
en Sevilla es emocionante y Sevilla nos conecta con todos los poetas
contemporáneos; es la ciudad que tiene el mejor plantel de poetas", ha
señalado para citar después a Gustavo Adolfo Bécquer, los hermanos Machado o Luis Cernuda.
Además,
ha asegurado que el Ejecutivo mantiene su intención de convocar antes
de fin de año un Consejo de Ministros en Barcelona, aunque no ha
confirmado que, cuando se concrete, Sánchez se reúna con el president,
Quim Torra, a semejanza de la entrevista que ha mantenido hoy en el
Palacio de San Telmo con la presidenta andaluza, Susana Díaz.
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