martes, 28 de mayo de 2019

Sin reformas, España corre el riesgo de convertirse en un "país satélite"

GINEBRA.- España requiere reformas económicas que se van aplazando continuamente, sin las que corre el riesgo de convertirse en un "país satélite", dependiente de lo que pasa fuera, ha explicado este martes el economista Arturo Bris, al comentar la lista global de la competitividad 2019, que confecciona el centro que dirige.

En ese listado que elabora anualmente el Centro Mundial de la Competitividad de la escuela suiza de negocios IMD España figura, como el año pasado, en el puesto 36 de un total de 63 economías analizadas en función de 235 indicadores para cada una.
Singapur lidera el escalafón este año, desbancando a Estados Unidos de su habitual primer lugar.
Al analizar el caso de España, Bris dijo que, en la situación actual, la perspectiva es "que dependeremos cada vez más de lo que pasa fuera porque estamos demasiado expuestos a las tendencias geopolíticas, a las guerras comerciales o a lo que pasa en Alemania".
Lo que suceda en esos ámbitos terminará contando "mucho más de lo que hace España, y este es el problema de la falta de reformas, el que al final pueda convertirse en un país satélite", sentenció.
La clave para que España realmente sea competitiva está en "buscar la diferenciación de su economía y formular una estrategia económica y política de largo plazo y seguirla, para lo cual se necesitan obviamente consensos nacionales".
"En temas básicos, como la educación, no hay consenso y por esto no hay reforma", citó como ejemplo el investigador español.
Otro aspecto a repensar es la urgencia "de reducir el peso del sector público en la economía", dijo, para enseguida aclarar que aquí no se trata de privatizaciones, sino a cambiar ciertos modos de funcionamiento que pesan sobre la competitividad española.
"Tenemos una de las mayores tasas de antiguos representantes del sector público en consejos de administración y hay sectores como la construcción, la banca o las telecomunicaciones que están, si no masivamente regulados, al menos muy influidos por el sector público", sostuvo.
Bris explicó que la lista anual que elabora su institución es "relativa" y que si los países caen en la parálisis "tienden a caer porque otros países los sobrepasan".
"España se ha mantenido no porque haya hecho algo, sino porque hay varios países, sobre todo latinoamericanos, que han caído, así que España se mantiene no por mérito propio, sino por problemas de otros", declaró.
El ránking del Centro Mundial de la Competitividad muestra el dominio de Singapur, que se atribuye a su avanzada infraestructura tecnológica, la preparación de su fuerza laboral, sus leyes favorables a la inmigración y las formas prácticas en que se promueven los nuevos negocios.
Estados Unidos ha perdido su primer lugar de 2018 y de años anteriores (ahora está en tercer puesto tras Hong Kong) porque el efecto inicial de entusiasmo generado por las políticas fiscales adoptadas por la Administración del presidente Donald Trump ha decaído, según el análisis del IMD.
Aunque EEUU siga dictando el ritmo en cuanto a desempeño económico y de infraestructuras, su economía se ha visto afectada por los altos precios de los combustibles, una disminución en las exportaciones de tecnologías y fluctuaciones del dólar.
Para Bris, los mercados se encuentran ante incertidumbres de talla por los rápidos cambios en la política internacional y en las relaciones comerciales, frente a los cuales sólo instituciones fuertes pueden garantizar la estabilidad que se necesita.
Asia surge en este listado como un modelo de competitividad, con once de sus catorce principales economías que ganan posiciones o al menos mantienen las que tenían, además del hecho de que Singapur y Hong Kong encabezan la lista.
La excepción en ese cuadro es Japón que cae cinco lugares hasta el puesto 30 debido a su debilitada economía, la deuda gubernamental y un entorno de negocios poco propicio.
En el caso de Europa, gran parte de las mayores economías han perdido posiciones, como la alemana, que bajó dos y está en el puesto 17, mientras que Reino Unido aparece en el 23, tres más abajo que el año pasado, afectado por el Brexit.

No hay comentarios:

Publicar un comentario