MADRID.- El PSOE propone conceder ventajas fiscales a los propietarios de
viviendas que las alquilen a precios razonables, en especial a los
jóvenes, y se atengan a un sistema público de referencia, y a los
inquilinos con menores ingresos para fomentar así el alquiler estable.
Estas medidas están incluidas en una Proposición de Ley que el Grupo Socialista
ha presentado en el Congreso y que este viernes ha explicado la
secretaria de Ordenación Territorial y Políticas de Vivienda del PSOE,
la exministra de Vivienda Beatriz Corredor.
El objetivo, según Corredor, es hacer frente a la subida de los alquileres, que ha atribuido a tres factores esenciales: el auge de los apartamentos turísticos, el repunte de la inversión inmobiliaria y la reforma de la Ley de Arrendamientos Urbanos realizada por el Gobierno del PP en 2013.
El PSOE quiere promover un sistema público de precios de referencia del alquiler que deberán desarrollar las administraciones competentes, generalmente los ayuntamientos.
Los propietarios de inmuebles que respeten esos precios de referencia al fijar el alquiler podrán beneficiarse de ventajas fiscales, en concreto de una desgravación del 60 % de su rendimiento neto en el IRPF, ha explicado Corredor.
Si el propietario acomete obras en el inmueble para
mejorar la eficiencia energética y eleva en dos categorías o más el
certificado energético, la desgravación aumentará en un 10 % adicional.
Además, si alquila la vivienda a un joven de entre 18 y 30 años con ingresos bajos, la desgravación será del cien por cien.
El PSOE plantea también ventajas fiscales para los inquilinos que tengan una base imponible inferior a 30.000 euros anuales, que podrán deducirse un 10 % de las cantidades que paguen en concepto de alquiler.
Por otro lado, si un propietario vende una vivienda para comprar otra
y dedicarla al alquiler durante al menos diez años, el beneficio
obtenido por la venta del primer inmueble quedará excluido del IRPF.
Estas ventajas fiscales están dirigidas a propietarios particulares y no a empresas.
Por otro lado, la Proposición de Ley plantea que las subidas de los alquileres se atengan, de nuevo, al IPC
y que los contratos de arrendamiento vuelvan a tener una prórroga
forzosa de hasta cinco años, plazo que el PP había reducido a tres en la
reforma de 2013.
El Grupo Socialista propone que los inquilinos puedan seguir en la
vivienda durante al menos cinco años si el propietario vende el inmueble
o se ejecuta la hipoteca.
El PSOE quiere limitar las fianzas y avales que el inquilino debe aportar
para alquilar una vivienda. Si el alquiler es inferior a 750 euros, la
suma de la fianza y otras garantías no podrá superar el importe de dos
mensualidades. Si el alquiler está comprendido entre 750 y 1.200 euros,
las garantías no podrán exceder de tres mensualidades. Para alquileres
de mayor cuantía, las partes podrán pactar cualquier garantía.
Según la Proposición de Ley, las disputas sobre impagos por importes reducidos podrán resolverse en juicios de menor cuantía para agilizar los procedimientos.
El PSOE quiere que las resoluciones de desahucio de la vivienda
habitual lleven aparejada automáticamente una notificación a los
servicios sociales competentes.
La Proposición de Ley plantea diferenciar con precisión el
arrendamiento de viviendas, el alquiler de temporada (quince días o más y
sin servicios añadidos) y la cesión temporal de corta duración,
aplicable a los apartamentos turísticos, que quedará fuera de la Ley de
Arrendamientos Urbanos.
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