Anoche en el Hospital Clínico de
Madrid donde estaba ingresado por una dolencia banal, una colecistitis,
fallecía de un fallo cardiaco a los 90 años Antonio García-Trevijano, un
luchador incansable por la libertad y el más grande pensador político
en español de todo el siglo XX (1),
cuyas obras de teoría política son las únicas europeas modernas que se
encuentran en la Biblioteca del Congreso de los EEUU.
En
los años
sesenta y setenta encabezó la única oposición democrática al franquismo
(el Partido Comunista era una oposición mas totalitaria aún que el
franquismo, y el PSOE estaba de vacaciones). Amigo personal de D. Juan
de Borbón aunque republicano, solicitaría su consejo en numerosas
ocasiones, y siempre criticaría a su hijo Juan Carlos el haber
traicionado a su padre.
A
la muerte de Franco quiso promover la ruptura democrática rechazando
toda Constitución que no fuera elaborada a través de un proceso de
libertad constituyente,
donde la opción monarquía o república debería ser votada por el pueblo y
no impuesta como lo fue por el franquismo.
Encarcelado
por Fraga,
denunció la traición de Suárez ("un falangista ignorante sin el menor
sentido del Estado") y los partidos legalizados, que robaron la
democracia a los españoles y la sustituyeron por un régimen oligárquico
de
partidos sin separación de poderes, cuyo único interés eran el poder,
la relevancia social y la riqueza, y sin la menor idea ni grande ni
pequeña de España.
Impusieron
"una Constitución al pueblo y un Estado autonómico que es el mas
ineficiente, despilfarrador y corrupto de Occidente y que está llevando a
la ruina económica, política y social a la nación". La doctrina
política de Trevijano es la que está inspirando hoy a la oposición
radical venezolana, y es la base de varios regímenes democráticos de la
región.
Para
Trevijano, la cobardía de los presidentes de Gobierno de la
Transición ha hecho creer a los gobernados la barbarie de que las leyes
solo se cumplen mediante consenso o acuerdos bilaterales. Esta creencia,
fruto del oportunismo y del miedo a ser tachados de franquistas, es
algo tan monstruoso que lleva directamente a la destrucción absoluta de
cualquier atisbo de un Estado de derecho.
También denuncia que la
Corona jamás se ha comprometido, mas allá de declaraciones grandilocuentes y banales,
en defensa de la unidad de España, que es su única función
constitucional y la única justificación de la monarquía. "Es obligación
esencial mediar y solucionar los conflictos entre instituciones, algo en
lo que el monarca no ha movido un solo dedo".
La muerte le sorprendió mientras preparaba una querella penal contra Mariano Rajoy
por ser "impulsor y beneficiario político y personal de la corrupción",
y por "haber hecho dejación absoluta de su obligación de hacer cumplir
la Constitución y la ley y de la defensa de los derechos humanos de los
catalanes no nacionalistas", así como por "haber permitido la
utilización de edificios oficiales y financiado con dinero público
procedente del FLA a una organización criminal para la ruptura de
España, un hecho sin precedentes en la historia política de Europa".
La desastrosa gestión de la declaración de independencia y la aplicación de un 155 irrisorio
—dejando todas las estructuras de poder, el control de los medios y la
capacidad de coacción en manos de los golpistas—, que improvisó unas
elecciones exprés que nadie pedía, antes de haber restaurado la
democracia secuestrada, le llevaba también a incluir en la querella a la
vicepresidenta Santamaría.
(*) Catedrático emérito de Economía en la Universidad Politécnica de Madrid
(1) Antonio García-Trevijano,
como afirma la prestigiosa University Press of America, "is a prominent
figure of Spanish politics since de late sixties, one of the most
important european intelectual figures of 20th century both in politics
and aesthetical Theory" ("es una figura prominente de la política
española desde finales de los sesenta, una de los mas importantes
figuras europeas intelectuales del siglo XX, tanto en teoría política
como estética").
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