MADRID.- Por segunda semana consecutiva, el Ejecutivo de Mariano Rajoy afrontará
el próximo miércoles una sesión de control centrada en los casos de
corrupción que afectan al PP y sus derivadas. El martes, además, el
pleno debatirá la moción en la que el PSOE propone reprobar al ministro
de Justicia, Rafael Catalá, al fiscal general del Estado, José Manuel Maza, y al de Anticorrupción, Manuel Moix, por su gestión de la operación 'Lezo'.
"Yo quiero hacer un llamamiento a la prudencia y a la
cautela de los grupos parlamentarios, especialmente aquellos que han
sido partidos de Gobierno, porque no es bueno para las instituciones
achacarles comportamientos incorrectos", ha advertido el portavoz del
Ejecutivo.
Íñigo Méndez de Vigo
sigue sosteniendo que el afloramiento de nuevos escándalos o datos
sobre investigaciones en marcha es la prueba de que el Ministerio
Público "está funcionando adecuadamente". Es más, desde el Ejecutivo se
descarta la tesis de que la justicia avanza “pese” a los actuales
responsables de la Fiscalía.
“Pediría cautela en esta cuestión porque se pueden dañar las
instituciones del Estado y no es bueno en un momento en el que España,
después de años difíciles, es una referencia en Europa y América
Latina”, ha insistido el portavoz en la rueda de prensa tras el Consejo
de Ministros.
Méndez de Vigo censura, además, que los socialistas
negaran el miércoles toda credibilidad a Catalá incluso antes de
escuchar su comparecencia en la comisión de Justicia. “Quedé muy
sorprendido -ha confesado- (…); el Gobierno da explicaciones, lo hace,
lo ha hecho y lo hará, y por tanto pido a los grupos parlamentarios que
esperen a esas explicaciones y se tomen estas cosas con cierta calma”.
Fuentes de la Moncloa descartan que la reprobación, de salir
adelante, vaya a tener “efectos jurídicos”. El presidente, garantizan,
no está dispuesto a cesar a su ministro de Justicia. Aunque admiten que
la “sanción política” supone un elemento de desgaste para el Gobierno
del PP.
El propio Catalá, en declaraciones ante varios periodistas en Denia (Alicante),
ha afirmado este mismo viernes que "no hay fundamento" para que sea
reprobado en el Congreso y ha añadido que en los últimos días ha dado
"todo tipo de explicaciones".
Antes de dar la conferencia 'La agilización de la Justicia:
un reto compartido' durante las jornadas jurídicas Lex Fórum, Catalá ha
enmarcado la iniciativa socialista "dentro de las técnicas
parlamentarias" de la oposición para ejercer su control del Ejecutivo.
Tras recordar que ha habido casos similares de reprobación a
miembros del gabinete en el pasado, ha afirmado que cuenta con la
"confianza del presidente de Gobierno", que es quien escoge a los
ministros.
"La confianza que yo necesito tener es la de mi presidente.
Me gustaría tener el apoyo de todos los diputados para llevar a cabo las
reformas de la Justicia pendientes, pero es decisión de los grupos
parlamentarios", ha manifestado. Y en cuanto al texto de la reprobación,
ha apuntado que, por lo que ha leído, le acusan de contribuir o
favorecer "determinadas injerencias en la Justicia o en la investigación
penal", lo cual es "falso".
A este respecto, ha puesto de manifiesto que esta semana ha
tenido comparecencias, interpelaciones y preguntas, y que ha dado "todo
tipo de explicaciones", pese a lo cual "si alguien considera que, sin
ninguna prueba o acreditación, puede presentar una reprobación a un
ministro, está en su derecho y la Cámara lo votará".
"El fiscal general del Estado y yo mismo hemos acreditado
que la fiscalía actúa con total sometimiento a la Ley y dedicación en la
instrucción de las causas de corrupción", ha continuado antes de
incidir en que "se han llevado a cabo todas las entradas, registros y
todas las detenciones".
También ha dicho que "están en prisión las personas con
respecto a las cuales se ha pedido prisión, y así lo ha decretado el
juez", por lo que no ve "donde están las dificultades a la
investigación".
"Es un derecho de los grupos parlamentarios, y con esa
normalidad de control del Parlamento al Gobierno lo tomo", ha
apostillado.
Preguntado por una información sobre un presunto chantaje al
presidente del Gobierno, Catalá simplemente ha comentado que conoce a
Rajoy desde hace dos décadas y que está convencido de que "no es una
persona a la que sea fácil someter a ningún tipo de chantaje".
Ha apuntado que en las últimas semanas han surgido
informaciones procedentes de sumarios declarados secretos, por lo que
desconoce la información, más allá de lo que publican los medios, y que
su capacidad de hacer análisis "es mínima".
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